lunes, 8 de octubre de 2007

CONFESIONES DE UN JOVEN CONFUNDIDO…


Porque fingir que estoy bien si no lo estoy, porque esbozar entonces una honda sonrisa cuando lo que en verdad siento es una profunda tristeza, que cuando ocupo ayuda sincera de un amigo a cambio recibo solo malas caras o fingen que me escuchan cuando solo me están volteando a ver, digo yo que pensarán, dirán acaso que yo no tengo derecho a recibir consejos de un amigo, creerán acaso que por mi duro aspecto no siento necesidad de ser escuchado de vez en cuando.


Bien dicen que los buenos amigos los conoces solamente en los funerales y cuando estas pasando momentos de angustia y tristeza. Entonces me pregunto yo porque siento que tengo amigos si yo siento que para ellos no lo soy, bien dicen que los buenos amigos los cuentas con los dedos de una mano, entonces como me gustaría tener mas de 5 dedos en mi mano para así poder tener más personas con quien compartir mis buenos ratos y porque no también los malos.


Por eso es que me siento confundido, porque no se en realidad en que personas puedo confiar, de hecho ya no se ni en quien confiar, probablemente me haga un chavo más reservado, porque me he dado cuenta que mi forma de ser actual no me trae nada bueno, solo malos ratos, bueno en los próximos días veré como me va con mis supuestos, y trataré de hacerles llegar las conclusiones a las que llegué.

martes, 2 de octubre de 2007

ENCUENTROS CASUALES

9:15 AM, me levantó como cualquier otro día de verano cuando el sudor frió me avisa que un nuevo día ha llegado. Aviento mi cobertor con tal furia, la misma furia con la que un águila abandona su nido. Siguiente paso, me libro del pecado incomodo que llevo por ropa y me meto a la ducha, que es peculiarmente rápida ya que olvida comprar el gas y no prende el boiler, salgo de baño y voy rumbo a mi cuarto y elijo lo primero que veo, bueno igual no tenia mucho de donde escoger. Me visto y me voy de nuevo rumbo al baño, donde el vanidoso espejo me llama para el ritual diario que consiste en exprimir hasta deformar la pasta de dientes, para luego peinarme manualmente, si, manualmente porque me peino con la mano ya que no tengo peine.


Saliendo del baño ya me preparo para salir a la calle, donde me encuentro a mis cuates sentados en la banqueta, casi inmóviles, pues no les gusta esforzarse para nada, cuando al ver esa escena al fin recuerdo el nombre y la dirección del lugar donde me recomendaron buscar trabajo. Basta de flojera, me dirijo hacia el punto, que al llegar a el me dio la impresión de haber atravesado toda la ciudad (lo bueno es que existe el metro).


Al llegar me encuentro con una escena cruel pero a la vez tan real y tan mexicana, decenas de personas en busca de unas cuantas vacantes. Llega el momento de la competencia y de la supervivencia, ¿qué tengo yo que no tengan ellos?, ¿qué aspecto tengo?, hey, pero yo tengo una carrera, me gradué de Ingeniero Civil en el Politécnico, ¿por qué me siento tan nervioso entonces?...

Tomó mi lugar esperando mi turno cuando me doy cuenta que me tocará esperar junto a una mujer, y yo dije, que demonios hace una mujer entre tanto hombre, en ese momento se activa mi machismo al pensar, bueno, un rival menos, jajaja. Minutos después noto que saca una revista que en su portada tenía a Niurka y a Bobby Larios en uno de sus escándalos, la hojea animadamente cuando atino a pensar, “Dios los hace, ellos se juntan”, al momento en que ella descargó una risa cautivadora que me deslumbró unos segundos, en eso me di cuenta que mi oponente no estaba tan mal, por lo que opté en sacar y hacer gala de mis habilidades en el arte del ligué, acción que no fue muy bien correspondida, yo no entendía el porque ya que me considero atractivo para el sexo débil por lo que en el tiempo que me tocó seguir esperando, me pasó rápido ya que se me fue en pensar y pensar en todo lo que pude haber hecho mal.


En ese momento me percate de que un jovenzuelo se le acercaba y la besaba cariñosamente en sus labios, ¡hey porqué la besas!, con que derecho pensé, cuando de pronto la mujer se para y le cede el lugar a lo que fue correspondido con un “gracias amor por cuidarme el lugar”, por lo que me retiré con la cola entre las patas y sin trabajo.